3 may 2010

Hallan en el lago Zúrich urnas con cenizas de posibles clientes de Dignitas



Por si la actividad de Dignitias, el centro suizo que asiste en el suicidio a todo aquel que lo desea -enfermo o no-, no anticipara un debate ético y moral intenso, la polémica vuelve a mirar sobre esta clínica que aprovecha la ley local sobre este tema.
La nueva controversia ha aflorado desde el fondo del lago Zúrich, donde se han descubiertodocenas de urnas que contenían cenizas de personas que en su día buscaron su muerte a través de este medio. "Después de 50, dejamos de contar", narra un oficial de policía citado por el diario 'TheTimes'.
La conexión entre el hallazgo y la clínica ha venido a través del logotipo, en una de ellas, del crematorio cuyos servicios contrata la empresa. Esta teoría viene avalada por una ex empleada de Dignitas, que afirmó hace unos meses que la clínica había depositado al menos 300 recipientes en el lago. De hecho, uno de los misterios que se cernían sobre el asunto era precisamente el destino final de los cadáveres.
La dignidad como premisa
Aunque una de las premisas de Dignitas era la dignidad con la que se llevaba a cabo el proceso y su posterior entierro o cremación, este descubrimiento podría poner en entredicho la misma actividad. Un portavoz de la iglesia de Zúrich calificó como "inaceptable" que no se estuviera realizando la ceremonia adecuada o que sencillamente se basen en criterios puramente comerciales.




Más allá de las implicaciones morales, queda por discernir el aspecto legal del asunto. Las autoridades deberán corroborar la relación entre las urnas encontradas y la clínica y será entonces cuando se indique si ello va en contra de las leyes de protección ambiental o el mismo contrato firmado con los usuarios. En el primer caso la firma podría recibir una multa económica de cerca de 35.000 euros.
Más de mil clientes
A lo largo de la existencia del centro unas mil personas, muchos extranjeros, han buscado el suicidio allí. La gran parte eran enfermos terminales que optaban por esta vía después de que en sus países de origen la legislación no amparase esta práctica o, en su defecto, la eutanasia.
Gran Bretaña, por ejemplo, es uno de los territorios que 'exporta' usuarios a Suiza. Se cifra en más de un centenar los británicos que han utilizado este servicio, lo que se ha venido en llamar jocosamente 'turismo de suicida'.




COMENTARIO


En este artículo se tratan dos temas éticos, por una parte tenemos uno que está a la voz del día como es la eutanasia, y por otro lado la manera de deshacerse de los restos humanos.

Al parecer en Suiza hay algún apartado legal que no prohibe la práctica del suicidio asistido, y esto es lo que aprovecha la empresa Dignitas.

El nombre Dignitas la verdad es que no hace mucho honor a su forma de actuar. Esto es porque se sospecha que la las personas incineradas que lanzaron al lago, no deseaban como último lugar de descanso, el fondo del lago suizo.

Al parecer habrá que seguir la noticia, ya que se va a continuar investigando para aclarar los contratos que firmaron las personas encontradas y saber si era ese su último deseo.



Santiago Puig Hermida 5º LADEM A

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